Azafrán

Las primeras referencias del azafrán nos transportan al año 2.300 a.C., pero no nos hablan únicamente de su relevancia gastronómica sino también de su uso en ritos y ceremonias religiosas, así como en medicina.

La delicadeza de la flor y su alto valor en el mercado nos llevan a conocer este producto como el "oro rojo", ya que, aparte de la elaborada producción que necesita, son necesarias más de 200.000 flores para obtener un solo kilo de azafrán.

El azafrán se ha constituido como un símbolo de La Mancha durante el siglo XX y queremos que lo siga siendo en el XXI. Ha exportado nuestro nombre por todos los países del mundo, ganando prestigio y fama por su indudable calidad, fruto del tamaño de su hebra,
de su inmejorable color, sabor y olor,
y del esmero en su elaboración.